Es el dulce más antiguo y emblemático de la Ciudad Heróica. Su nombre proviene del latín mel-coctum o "miel cocida". Y más cerca de la verdad no podría estar, debido al sabor único de esta golosina tacneña, que prácticamente es azúcar con forma, siendo la golosina más aceptada por los hogares tacneños y siendo consumida más allá de su ciudad local. Para ser más específico, en todo el sur del Perú se puede encontrar alguien que haga o venda las melcochas, pero no hay como las originales.
1/2 bola de chancaca en trozos
1 kg. de azúcar
3/4 kg. de maní entero
6 clavos de olor
Jugo de 1/2 limón
1 cucharada de leche evaporada
1 cucharadita de algarrobina
3 ramas de canela
1 cucharadita de vainilla
1 cucharada de aceite
En una olla echar una taza y media de agua y ponerla sobre el fuego Cuando empieze a hervir añadir el jugo de limón, la canela, la chancaca, el azúcar y los clavos de olor; dejar hervir a fuego medio por unos 30 minutos hasta que tome punto de caramelo Agregar los maníes enteros y cocinar durante 10 minutos. Colar la miel en un tazón de netal engrasado con aceite y mover la miel con una chuchara hasta que esté tibia. Colocar la melcocha en una fuente engrasada Jalar y torcer la melcocha hasta que tenga unos 80cm de largo Verter una cuarta parte de la mezcla de leche, algarrobina y vainilla Estirar y torcer la melcocha una vez más. Repetir este proceso hasta que el combinado de leche, algarrobina y vainilla se termine. Esperar a que se enfríe y endurezca. Cortar en trozos y servir.